Seis beneficios de ser amable contigo mismo
La amabilidad suele ser una virtud que estimamos en nuestras relaciones con los demás, pero ¿qué tan importante es practicarla con nosotros mismos? Aquí te contamos.
Es común hablar de los beneficios de ser amables y de las bondades de que esta conducta trae en nuestra manera de relacionarnos con los demás. Pero no siempre somos conscientes de la importancia de ser amables con nosotros mismos.
A continuación te presentamos algunos beneficios de tener una conducta amable con nosotros mismos.
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Seis beneficios de ser amables con nosotros mismos
- Priorizamos nuestro bienestar: cuando actuamos de manera autocomprensiva, no nos juzgamos y somos conscientes de nuestra condición en el mundo, de nuestras necesidades y posibilidades, es más fácil poner en un lugar de privilegio nuestros proyectos nuestro bienestar general.
- Fortalecemos nuestras habilidades: la amabilidad ayuda a ver aquello que otros no ven en los demás y valorarlo. Si somos amables con nosotros mismos veremos potenciadas nuestras facultades y fortalezas, puesto que reconoceremos las dimensiones en las que podemos destacar y trabajaremos aún más en ellas con humildad.
- Desarrollamos la entereza: si consideramos que la amabilidad ayuda a robustecer la esperanza, al ser amables con nosotros mismos trabajaremos nuestra capacidad de enfrentar las dificultades y de ser constantes aunque el camino se torne difícil.
- Paz interior: la complejidad de la condición humana, sus relaciones en el entorno que habita son prácticamente imposibles de controlar, no obstante, sí tenemos la facultad de estar en paz en dicho entorno y vivir nuestra interioridad de manera saludable. Ser amable contigo mismo facilita ese proceso.
- Mejoramos nuestra autoestima: las conductas asociadas con la amabilidad nos ayudan tener un vínculo afectivo más seguro con nosotros mismos, confiar en nuestras capacidades y en nuestras analizar nuestras posibilidades y ser humildes, aspectos que ayudan a nuestra estima propia.
- Podemos perdonarnos: cuando cometemos errores, solemos ser duros, pero ser ambles con nosotros mismos hará que podamos ver más allá del error, nos cuestionemos por las causas y las conductas que debemos mejorar y nos perdonemos para avanzar en nuestro proceso.
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