Validación emocional ¿cuál es su importancia en nuestras relaciones personales?
A la hora de dialogar, mediar, consolar a alguien, solucionar un problema en pareja, con nuestros hijos o amigos, la validación emocional es importante, pues es un proceso saludable que nos ayudará a tener relaciones más sanas.
Según la célebre psicóloga y profesora estadounidense Marsha M. Linehan, pionera en la terapia dialéctica conductual, la validación emocional es un proceso en el cual las manifestaciones emocionales de una persona son comprendidas, interpretadas y entendidas por aquella con la cual dialoga. Este proceso ocurre en relación con la historia y el contexto de quienes interactúan.
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A la hora de hablar de validación emocional, no debemos olvidar que la primera valoración emocional es la propia. A esto se le ha denominado “autovalidación”, y es el momento en el que aceptamos que nuestras emociones son legítimas tanto como las de los demás.
La validación emocional tiene tres componentes fundamentales:
- La condición voluntaria de la interacción: la validación emocional tiene lugar siempre que las personas que interactúan lo hagan de forma libre y voluntaria. Si existe algún tipo de coerción, no es posible la validación emocional, pues estará supeditada a un condicionamiento involuntario de alguna de las partes.
- La escucha o recepción: entre quienes interactúan debe existir la capacidad de percibir el mensaje del otro. Si es imposible transmitir un mensaje, no habrá comunicación y, en consecuencia, tampoco habrá validación.
- La legitimidad de las emocionales: quienes interactúan deben saber que las emociones que el otro manifieste deben recibirse como algo legítimo, es decir, que el otro tiene todo el derecho de sentirse como se siente, y que sentirse así es coherente y tiene sentido.
En los procesos de negociación, resolución de conflictos, discusiones de pareja, terapia psicológica u otros de interacción, el procedimiento de valoración emocional es esencial. Invalidar las emociones de los demás puede conllevar múltiples problemas.
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Conductas que invalidan las emociones del otro:
- Prejuzgar la emoción
- Instruir o guiar la emoción
- Castigar la emoción
- Crear un ambiente hostil
- Contradecir la emoción
- Trivializar la emoción
- Criticar la emoción
Buenas prácticas para la validación emocional
- Proponer oportunidades para expresar emociones
- Prestar atención a las distintas emociones
- Comunicar la comprensión y legitimidad
- Identificar los componentes de la emoción (impulsos, sensaciones, disparadores, etc.)
- Mostrar empatía