Cuidar tus finanzas en diciembre favorece tu salud emocional

Ojo a las finanzas de fin de año

Diciembre es un mes que nos convoca entorno de tradiciones que suelen implicar algunos gastos de más, las reuniones con amigos, familia, colegas, eventos sociales, visitas, salidas de vacaciones, viajes para acompañar a algún ser querido o cualquier otra actividad que nos acerque a quienes más queremos. Además de los regalos y cenas navideñas.

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Cada una de estas actividades, no solo demandan una importante cantidad de tiempo sino que, casi siempre, implican un gasto de dinero adicional, de modo que es muy frecuente que nuestros gastos incrementen. Esto puede no ser beneficioso para nuestra tranquilidad, puesto que muchas veces, al no planear o destinar un presupuesto, compramos de más de lo que podemos permitirnos y, una vez haya pasado el momento, podemos sentirnos angustiados o ansiosos.

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Cinco claves para cuidar las finanzas en diciembre

Es por eso vale la pena considerar algunos puntos claves para manejar de manera inteligente nuestras finanzas en el fin de año.

1. Presupuesto: este es el punto más importante. Determinar cuánto dinero puede gastar en sus compras personales, eventos y demás sin endeudarse (tarjetas de crédito y otros). No se permita gastar de más y no se sienta obligado a hacerlo. Sus prioridades deben ponerse por encima de las situaciones mercantiles. Elabore el presupuesto realista y cíñase a él.
    
2. Lista de regalos: aquí la clave será preguntarse a quién quisiera obsequiarle algo en señal de aprecio por Navidad. El consejo es que descarte a las personas a las que incluyó en la lista si considera una obligación hacerlo o se siente presionado. Intentar ver de qué otra manera puede manifestarles su aprecio puede ser una alternativa. Lo mismo que identificar grupos a los cuales pueda hacerles un regalo colectivo en lugar de gastar en distintos presentes.
    
3. No a los gastos innecesarios: si ya ha decidido cómo usará el presupuesto que elaboró, sea consciente de no realizar otros gastos adicionales que no sean necesarios (compras impulsivas, mayoreo innecesario, decoración excesiva, etc.). Es muy frecuente que en diciembre se gaste en exceso, pero al llegar enero, vienen las preocupaciones. El autocontrol en el gasto es fundamental.
    
4. Tenga cuidado con las promociones: las promociones suelen hacer que gastemos más de lo que habíamos presupuestado. Una promoción puede ser funcional si se tiene presupuestado determinado dinero para ese tipo de compra, de lo contrario, nos arriesgamos a excedernos en los gastos. 
    
5. Piense en el futuro: el año acaba en diciembre, pero la vida no. Parece una frase humorística, pero es una idea esencial para controlar los gastos decembrinos. Los gastos en educación de principios del año entre otras obligaciones que suelen surgir después de la Navidad deben mantenernos con cabeza fría en el gasto. Ser conscientes de esto puede ayudarnos a moderar el consumo.