¿Existe una conexión entre la depresión y el sueño?
¿Tener depresión da sueño o el sueño genera depresión? Una de nuestras expertas responde.
En el mundo, más de 300 millones de personas padecen depresión, mientras que el 40% presenta problemas de sueño, según la Organización Mundial de la Salud (OMS). ¿Estas cifras de los dos trastornos tienen alguna relación? Sí, su vinculación se genera de manera interesante.
Según Catalina Botero, coordinadora de psicólogos de Porque quiero estar bien, “existe una doble vía entre el sueño y los trastornos, como la depresión. A veces, una persona presenta un problema emocional que evoluciona a un trastorno mental y esta condición afecta los patrones de sueño. Por ejemplo, quien presenta depresión puede tener el deseo de dormir más o tener inconvenientes que no lo dejen dormir, pero también hay casos en los que ocurre al revés. Es posible que una persona empiece a tener un bajonazo en su estado de ánimo y, a causa de él, pierda la motivación para realizar diferentes acciones cotidianas y prefiera quedarse durmiendo, pues al involucrarse en menos actividades, tendrá menor motivación y gratificación, y esto puede hacer que se desarrolle un trastorno depresivo”.
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Por eso, no se puede afirmar siempre que uno lleve al otro porque se puede presentar de ambas maneras. Aunque, si ampliamos un poco más la información anterior, hasta el 70 % de las personas con depresión tienen algún tipo de trastorno del sueño como el:
- Insomnio, que genera dificultad para conciliar el sueño o permanecer dormido durante largos periodos de tiempo.
- Hipersomnia, que es cuando la persona se siente somnolienta durante todo el día, de una manera anormal, incluso si ha dormido lo suficiente.
Soluciones
Según señala el medio Healthline, la recomendación es que si la persona tiene depresión y está experimentando síntomas relacionados con el sueño debe buscar tratamiento para la depresión, pero si presenta un trastorno del sueño y nota señales de depresión, es más útil tratar el trastorno del sueño para reducir la depresión.
Algunos tratamientos para la depresión incluyen:
- Ir al psicólogo para manejar las emociones, pensamientos y comportamientos, a través de la terapia.
- En caso de ser necesario, asistir al psiquiatra y ser juicioso con los medicamentos, en caso de que los prescriba.
- Exponerse a luz blanca para regular el estado del ánimo.
- Cambiar el estilo de vida.