¿Puedo saber si tengo TOC con un test?

Psicóloga clínica
¿Eres de los que piensa que un test te ayuda a resolver dudas sobre tu personalidad, cómo te sientes y hasta qué podrías tener? Si es así, este artículo es para ti.
La respuesta es sencilla, definitivamente no. Suele suceder que, cuando creemos tener algún síntoma físico recurrimos a buscar rápidamente en internet para darle explicación a lo que sentimos o le preguntamos a un vecino, amigo o familiar para encontrar una respuesta y, en esta búsqueda rápida de información, puede que encontremos una respuesta que esté relacionada con algún tipo de enfermedad médica. ¿Crees que es suficiente? o, definitivamente, ¿irías al médico para comprobar lo que leíste?
Lo mismo sucede con los trastornos de la salud mental. Muchas veces presentamos algunos síntomas, leemos sobre ellos en Google y pensamos en si realmente nos identificamos con lo que dice allí, en este caso, el TOC puede ser un ejemplo. ¿Existen obsesiones y compulsiones comunes?
Todos los seres humanos tenemos la tendencia a, por ejemplo, verificar dos veces si estamos en la dirección correcta, ir en el bus y pensar si cerramos el fogón de la estufa o la puerta al salir de casa, o tal vez, seas muy ordenado/da, disfrutas de tu casa limpia y demás, pero ¿realmente es TOC? Esta pregunta nos puede llevar a buscar maneras de confirmar ese diagnóstico, tal vez con una prueba rápida u otro instrumento; sin embargo no es así de fácil.
El diagnóstico del trastorno obsesivo compulsivo (TOC), y en general todos los trastornos mentales existentes, requieren de apoyo de un profesional en psicología e incluso, de un profesional en psiquiatría para llevar a cabo entrevistas clínicas que les permitan recolectar información y, posteriormente, realizar una evaluación exhaustiva que indique algún diagnóstico. Un trastorno mental no define quién eres, eres mucho más que un diagnóstico
En el marco de este proceso es válido utilizar algunas pruebas, pero no de manera aislada. Los test dentro de un proceso de evaluación, diagnóstico y tratamiento de un trastorno pueden ser de utilidad para revisar los avances de la terapia y la disminución de los síntomas y ver si realmente el tratamiento está siendo efectivo.
Además de la aplicación de ciertas pruebas, el profesional que trate el caso realizará entrevistas muy detalladas, en las que indagará sobre los síntomas, la historia personal y la historia familiar, así como por detalles relacionados con el consumo de sustancias psicoactivas pues, en algunos casos, estas pueden detonar episodios que pueden ser confundidos con la presencia de un trastorno.
Es posible, además que en algunos casos se soliciten ciertos exámenes médicos, como pruebas de sangre, resonancias magnéticas o tomografías, si bien esto no pasa siempre en algunos casos se utilizan para descartar otro tipo de afectaciones en salud y estar lo más seguros posibles del diagnóstico.
Te invitamos a leer: ¿Cuál es la diferencia entre trastorno mental y enfermedad mental?
Sumado a todo lo anterior, seguramente va a ser necesario que la persona empiece a llevar un registro juicioso de su estado de ánimo, patrones de sueño y conductas con el propósito de monitorear cambios repentinos, detonantes y situaciones asociadas a estos cambios y, de esta manera, identificar si existe algún patrón que indique la presencia de episodios maníacos o depresivos.
Teniendo todo esto en cuenta, lo más probable es que cuando hablamos de afectaciones importantes en la salud mental, lo más probable es que antes de tener un diagnóstico debamos hacer varias visitas al profesional de manera que él o ella puedan recabar toda la información relevante.
Recuerda, es importante dejarnos guiar por un profesional en salud mental. Ten en mente: un diagnóstico no te define, solo nos sirve de referencia a los psicólogos para saber cómo ayudarte.